La propuesta curatorial, que ronda los conceptos de turbulencia, desarraigo y persistencia consta de cinco artistas de la generación 2022 del Título de Producción Visual y sus respectivas obras con las que culminan un proceso investigativo y su formación académica.
La exposición estará en exhibición en la Sala CAP del Museo Casa del Arte José Clemente Orozco (Pinacoteca UdeC) hasta el 10 de diciembre.
La exposición surge como respuesta a un año de trabajo artístico como generación 2022 del Título de Producción Visual. En el marco del retorno a la presencialidad, después de dos años de confinamiento que obligaron a mantener una relación netamente virtual, los/as estudiantes se vieron en un escenario complejo, con una sensación de debilidad que consideran que dificultó su proceso formativo. Sin embargo, utilizaron esta experiencia como fuente de diálogo y reflexión, lo que decantó en el concepto de “desarraigo”.
Destacan la revolución feminista de 2018, el estallido social de 2019 y la pandemia de Covid-19 de 2020, además del plebiscito nacional, como procesos históricos turbulentos que remecieron su noción de normalidad durante su etapa académica. Siendo un periodo marcado por sensaciones de incertidumbre, agotamiento y ansiedad, al volver a la presencialidad no pudieron evitar una sensación de “no pertenencia” que, finalmente, les llevó a preguntarse “¿Qué sentido tiene crear desde la vereda artística frente a un futuro impredecible que transforma constantemente nuestra realidad?”.
Como generación, concuerdan en que el sentido que les impulsó a seguir adelante estaba en la persistencia, ya que en la creación artística encontraron una posibilidad de aportar a las transformaciones individuales y colectivas, además de generar espacios significativos e impulsar el diálogo a través del arte. Finalmente, “Mala Hierba”, es una metáfora de la persistencia generacional, propia de las plantas salvajes y porfiadas.
El montaje de la exposición cuenta con cinco obras y sus correspondientes abstract, incluyendo tres vitrinas de proceso y un mapa conceptual para comprender los diálogos entre las distintas obras frente a un recorrido generacional en torno a los contextos turbulentos, el desarraigo y la persistencia. En opinión general del equipo comentan haber logrado un alto nivel de satisfacción con el trabajo y el montaje de las obras.
De la raíz a las hojas
Si bien los/as estudiantes detrás de “Mala Hierba” afirman haber cultivado esta persistencia de forma individual, destacan a nuestro Departamento de Artes Plásticas UdeC y su cuerpo docente como un valioso aporte en sus procesos de formación. Si la exposición se nutre de distintos lenguajes como la fotografía, la ilustración y la instalación artística, es posible gracias a la profundización técnica y conceptual adquirida en sus años de formación en la escuela de artes.
Como generación 2022, consideran esta exposición como el cierre y culminación de su etapa universitaria. En adelante, cada integrante del equipo pretende seguir desarrollando proyectos tanto individuales como colectivos, sabiendo que es altamente probable que sigan encontrándose.
A continuación, les dejamos una breve reseña de cada artista y su obra dentro de la exposición:
Fernanda Alarcón Mussiett
Desde 2020, en el marco de la pandemia de Covid-19, comienza a indagar en la temática del cotidiano, desde una perspectiva que busca relevar el valor del día a día. En esta exposición trabaja, principalmente, la fotografía y la ilustración digital.
Su obra, “Intersticios cotidianos”, es una obra que invita al espectador a entrar en espacios hogareños, dónde son esos momentos íntimos y efímeros los que cobran protagonismo a través de la mirada de quienes los habitan. Para esto se recopilaron 200 fotos que cuentan un pedacito de estos momentos. Estas fotos se encuentran atravesadas por mi archivo fotográfico familiar, donde empezó todo, lo que se tradujo en la convivencia de fotos de hace 30 o 40 años con las actuales. A su vez, todas las fotos se encuentran editadas con pintura digital, unificando paletas de colores y otorgándoles más personalidad a estas imágenes.
Martín Rivas
Artista visual cuyo principal foco de interés ha sido el estudio de la sexualidad y el género desde perspectivas críticas, problematizando las construcciones sociales, políticas y culturales que han tenido en la historia. Los principales lenguajes que trabaja son la gráfica análoga, digital y los medios instalativos.
Su obra, “S3X MaCH1N”, sintetiza todo un proceso de investigación teórica en torno al cuerpo, la sexualidad, y sus posibilidades a través del cruce que puede existir entre estas nociones con las tecnologías contemporáneas. La propuesta busca generar un espacio de ciencia ficción a través del lenguaje instalativo y la animación, representando así un cuerpo (autorretratado) que experimenta transformaciones en torno la experiencia con la sexualidad hegemónica. Así, se propone un manifiesto visual que viene a plantear principios personales en torno a los límites de la femineidad y masculinidad.
Constanza Aguilar Molina
Su interés principal como artista son los imaginarios y el modo en que estos pueden hablar de la realidad o cuestionarla. Durante su formación centró su atención en la narración y el mundo onírico, profundizando en sus escritos personales, en la experimentación gráfica y en las posibilidades tridimensionales, con la intención de lograr habitar espacios de forma física y conseguir una experiencia inmersiva. Ha desarrollado, principalmente, áreas como la ilustración, el grabado y la instalación.
Su obra, “Construcciones de lo intangible”, tiene el objetivo de problematizar y hacer un levantamiento de los sueños como generadores de sentidos y conocimientos, por medio de una instalación creada con relatos oníricos mediante volumen en papel. Las formas, los pliegues, las transparencias, las sombras y las siluetas juegan al azar creando una narración de origen colectiva que dialoga y construye con el espectador.
Alejandra Fritz Muñoz
Como artista visual, si bien su foco de intereses y técnicas ha variado; en el marco de esta exposición elige la exploración de un oficio, cuestionando la relación entre el material orgánico, que es la pita, con su efecto desencadenante de memoria; que, a través de los sentidos, funciona como persistencia. Este carácter efímero del material es una alegoría a la fragilidad de la memoria. Los lenguajes con los que trabaja son, principalmente, el tejido y los medios instalativos.
Su obra, “Mnemónica palpable”, es una instalación artística realizada en pita y de gran formato. Es un homenaje al oficio y la herencia donde se genera una conexión con aquellos últimos lapsos de memoria de su abuelo, lo que incentivó la evolución de esta obra hasta que se convirtió en un hacer casi automático, donde mientras tejía, los recuerdos se entrelazan en cada fibra, trenza y costura, y el olor y el tacto se convirtieron en un desencadenante de memoria, transformando lo intangible en tangible.
Antonia Trillat Macalusso
Afirma siempre haber tenido un fuerte enfoque en la gráfica y durante el transcurso de la carrera, su visión sobre cómo ésta puede ser aplicada se amplió enormemente, gracias a las influencias, referencias y la guía de distintos/as docentes.
Su obra, “La nada que se come al mundo”, toma su nombre de una frase que se ha repetido y en su último año de carrera, decidió apoderarse de ella para iniciar un proceso de investigación. Comenzó como una sensación de incertidumbre y una serie de dibujos, y terminó convirtiéndose en un cuestionamiento al ser-artista. La obra es el resultado de un trabajo investigativo y de taller que toma esa incertidumbre inicial, le otorga una dirección y una manera de sustento mediante la literatura y filosofía en la forma de un Atlas repleto de información.